Lunes 16 de junio del 2.008. 20:00h.
“El destino es un papel en blanco en el que cada uno escribe su propia historia”.
Al igual que ésta frase célebre yo siempre he dicho: la vida es un lienzo en blanco, ¡píntalo de bellos colores!.
Cuando deseamos ser mejores todo es mejor. La energía que nos envuelve es transmitida y absorbida por todo cuanto nos rodea. Transformando nuestra atmósfera y asemejándola a nuestro estado de ánimo. Ser felices es más fácil de lo que parece porque sólo depende de nosotros, de nuestra visión de las cosas, de nuestras reacciones.
La autocompasión no tiene cabida en mi vida porque el tiempo es demasiado precioso como para perderlo cavando mi propio agujero.
El destino no es más que el fruto de tus propias decisiones.
Nacemos con la misión de aprender con cada experiencia, lecciones que a menudo se disfrazan de equivocaciones. La vida es una escuela, un camino lleno de exámenes que sólo conseguiremos aprobar si no nos dejamos engañar por ése disfraz.
El secreto está en “querer” ver mas allá. En comprender aquellas palabras que no son fáciles de escuchar, esas que suenan dentro de ti, esas que pronuncia la persona que una vez olvidaste que está.
Hoy comprendo que la vida es algo más que sentarse a esperar.
“Hoy quiero ser aquello que soy”.
